Ferias,
Mercados y Mataderos

Con 975 expositores, un 4 % más que en la pasada edición, la Feria Internacional para la Producción Animal que se celebra en Zaragoza hasta el día 22 ha vuelto a demostrar que la ganadería es más que carne: un sector conectado con el agrario en el que innovación tecnológica y sostenibilidad van de la mano.

De hecho, cuando uno traspasa los tornos del recinto Ferial y se adentra en los pabellones descubre que el ganado ocupa muy poco lugar, un único pabellón de los seis dedicados a la exposición que reúne una diversidad de razas de siete especies ganaderas, el resto, todo lo relacionado con el equipamiento de las instalaciones, el transporte de animales, su alimentación y su salud para lograr una producción óptima.

De las 975 firmas, 394 son expositores extranjeros procedentes de 29 países, lo que sumado a los cientos de delegados internacionales llegados de 85 empresas de 15 países hacen de esta feria un referente en el sector, como ha destacado antes de la inauguración el presidente de la institución, Manuel Teruel.

Pero además sirve para mostrar a Aragón "como una potencia internacional de primer orden en exportación", según ha destacado el consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno autonómico, Joaquín Olona.

Tanto Olona como el secretario general de Agricultura y Alimentación del Gobierno central, Fernando Miranda, han incidido en que Figan es un exponente del sector agrícola y ganadero español pero también de "nuestra tecnología", que es lo que favorece ser "más competitivos y exportar a otros países".

En esta Feria, ha dicho Miranda, "se unen desde lo más tradicional a lo más moderno para dar la visión de un país innovador" pero que mantiene su cultura, vertebra el territorio y genera actividad económica, que es lo que contribuye, han señalado, a fijar la población.

El responsable ministerial ha incidido en que este sector tiene una visión "pública de servicio que va más allá del valor del mercado", al tiempo que ha subrayado el compromiso del Ministerio de Agricultura para que la producción sea "cada vez más sostenible" y capaz de estar en los mercados exteriores.

En esta edición destaca el auge de la innovación con el reconocimiento a 44 productos como mejoras y 12 novedades técnicas, entre ellas un sistema de defensa contra las plagas de insectos voladores, una caja de espuma de nitrógeno para humanizar la eutanasia de cerdos y aves, un aditivo para reducir las emisiones de amoniaco de los purines o un sistema para mejorar la selección genética en el cerdo midiendo la grasa intramuscular y la subcutánea.

En un proyecto similar a este último, pero para el cordero, trabaja la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Ovino de la Rasa Aragonesa (Angra), que este año también ha sido reconocida por su sistema de pesado en vivo de corderos mediante tecnología 3D, una investigación que se lleva a cabo desde 2017 con la Universidad de Zaragoza y la Casa Ganaderos.

Este sistema, como ha explicado a Efe el secretario ejecutivo de Angra, Adolfo Laviña, y del que se han diseñado dos prototipos, permite la mejora genética logrando que el cordero llegue al cebado tras su destete en el peso adecuado, además de que agiliza el pesado.

Estimulados por este tipo de reconocimientos al sector ovino, poco tecnificado, Laviña ha anunciado que ya trabajan en una aplicación para móviles también para el pesado en 2D.

Además se han reconocido cinco explotaciones pecuarias por su buena labor y gestión: Ganadería Valle de los Molinos (Toledo) en la categoría ovino; Agropecuaria Montgai (Lleida) en bovino; Grupo Avícola Rujamar (Cuenca) en el sector avícola y Ganadería Casaseca (Salamanca) y el Centro de Experimentación y Formación Porcino (Segovia), en el porcino.

Figan atrae no solo a empresarios y ganaderos experimentados sino a futuros emprendedores y trabajadores del sector, ya que sirve a los estudiantes de Veterinaria para hacer prácticas como voluntarios. Es el caso de Irati Zabala y María Eugenia Martín, quienes se encargan del cuidado de la alimentación de los animales, de cambiarles la cama, de proporcionarles agua y de avisar al ganadero si detectan algún síntoma de enfermedad.

También creen que les puede servir para darse a conocer y abrirse hueco en un sector, como ha dicho Martín, "muy machista" y que debe empezar a cambiar la mentalidad puesto que cada vez hay menos veterinarios chicos.

De grados superiores también había este martes numerosos estudiantes que, sin embargo, echaban de menos ver más ganado como ocurre en las ferias de Francia, según han apuntado Pablo Fustero y Sergio Colás, futuros ganaderos.

Eduardo Plo y Álvaro Marco, estudiantes del grado de Paisajismo, buscaban algo más relacionado con la agricultura, una parcela para la que han lamentado que no existe formación específica, y todos ellos se han quejado de la poca atención que les prestaban desde los expositores, que ajenos a su desorientación se limitaban a repartirles folletos.

Figan se completa con un ambicioso programa de actividades paralelas y más de 60 jornadas técnicas.