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Los ganaderos, y no el Lobo Ibérico, corren "peligro de extinción" a juicio de la organización agraria UPA, que ha rechazado la decisión del Ministerio de Transición Ecológica, adoptada este jueves, de incluir a ese cánido salvaje en el listado de especies de protección especial.

Esta decisión, tomada en el seno del Consejo Estatal de Patrimonio Natural y Biodiversidad, "deja sin alternativas a la ganadería autóctona, extensiva y ecológica", que en su opinión "pagará los platos rotos de esta medida" propuesta por Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo Ibérico (Ascel).

Para la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), el Lobo Ibérico en España no solo "no se encuentra en peligro de extinción por más que se empeñen algunos", sino que la especie "se ha expandido de forma importante en los últimos años causando daños importantes a la ganadería extensiva", sobre todo en Castilla y León, Asturias, Galicia, Cantabria, Madrid, La Rioja y País Vasco.

UPA, a través de una nota informativa, ha pedido al Ministerio de Agricultura que defienda a los ganaderos porque "está en juego la pervivencia de la ganadería extensiva en nuestro país y, con ello, su contribución al cuidado del medio ambiente, en especial de las zonas de montaña".

"Hace muchos años que el lobo no está perseguido en España. Lo estamos los ganaderos, y esta nueva decisión lo demuestra", añade la nota.