Ferias,
Mercados y Mataderos

El sector avícola catalán, que calcula que perdió un 10 % de su producción entre marzo y diciembre de 2020 debido a la pandemia, afronta este 2021 con incertidumbre por el comportamiento del primer semestre, aunque con la esperanza de asistir a una reactivación del mercado antes de acabar el año.

Francia ha sacrificado cerca de dos millones de animales para tratar de poner freno a los brotes de gripe aviar que desde noviembre se han ido propagando sobre todo por el suroeste del país, junto a la frontera española, lo que está diezmando en particular las explotaciones de patos.

La pandemia del Covid-19 ha provocado que los precios en origen del pollo se hayan desplomado un 70%, lo que pone en peligro la supervivencia de más de 5.500 explotaciones profesionales avícolas, según la organización agraria COAG.

Pocos sectores se están librando de los efectos negativos de la pandemia. El último en caer en esta riada de pérdidas está siendo el sector productor de carne de pollo español, un sector que supone el 12,75% de la producción ganadera, rozando los 2.500 millones de euros de valor.

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha informado hoy a las comunidades autónomas de que eleva el nivel de vigilancia y de bioseguridad en las explotaciones avícolas, como consecuencia de la situación de la zoonosis influenza aviar en el norte de Europa.

El número de positivos de Covid-19 confirmados por el Departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña supera ya los 130 entre los trabajadores de la empresa Padesa Roquetes, en el sur de Tarragona.