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Los administradores concursales de Alimentos Lácteos comunicaron oficialmente a la plantilla el inicio del expediente de extinción de contratos de todos los trabajadores de la planta de Outeiro de Rei, así como el inicio del período de consultas para negociar las indemnizaciones correspondientes, dentro de la fase de liquidación de esta empresa.
Lo confirmó en declaraciones a EFE el secretario comarcal de la FGAMT-CIG de Lugo, Christian López Carmona, que en los últimos meses ha ejercido como portavoz de la plantilla, quien también confirmó que por parte de la antigua dirección de la empresa nadie se puso en contacto con los trabajadores para explicarles los motivos concretos que propiciaron la liquidación de Alimentos Lácteos.
López Carmona aclaró que la extinción de contratos afecta a 80 trabajadores, o lo que es lo mismo, a la totalidad de la plantilla, dado que "desde que el grupo Pascual se hizo cargo de nuevo de las instalaciones" de Outeiro de Rei "se está ocupando del mantenimiento de la fábrica con personal propio".
A partir de ahora, precisó, se abre un "período mínimo de un mes" para negociar las indemnizaciones de los trabajadores afectados, aunque el líder sindical opina que el acuerdo entre ambas partes será difícil.
En ese sentido, explicó que es probable que "la administración concursal no ofrezca a los trabajadores más que la cantidad mínima legal establecida para despidos por causas objetivas, que asciende a veinte días por año trabajado, por lo que será muy difícil llegar a un acuerdo".
Por ello, también anunció que a lo largo de esta semana los representantes de los trabajadores intentarán mantener reuniones con "todos los agentes implicados" en la resolución de esta situación para analizar "las posibilidades de futuro" que se plantean en el actual escenario.
El primer objetivo para los representantes de la plantilla será "mantener la vinculación de los trabajadores con las instalaciones de Outeiro de Rei", por si se produce la venta o el alquiler de la fábrica a una nueva empresa dispuesta a reiniciar la producción.
Por otra parte, desde el punto de vista sindical, el trabajo también se centrará en conseguir que los actuales miembros de la plantilla de Alimentos Lácteos perciban "las mismas condiciones indemnizatorias" que los compañeros que dejaron la fábrica cuando el grupo Pascual se la alquiló a la empresa de base cooperativa.