Agricultura - Cereales


Ucrania y Rusia mantuvieron el comercio agrícola con España en el año de la guerra


Madrid - 2023-02-23 13:41:18
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Ucrania y, en menor medida, Rusia continuaron abasteciendo de productos agrícolas a España en 2022, el primer año de una guerra que enfrenta a los dos primeros y que ha puesto más trabas al comercio agroalimentario e influido en la subida de precios.

Según un análisis de los últimos datos provisionales del Ministerio español de Industria, Comercio y Turismo, las importaciones a España de productos agrícolas y alimentos procedentes de Rusia descendieron el 23,5 % en volumen en 2022 respecto al año anterior y se situaron en casi 635.700 toneladas.

El alza de los precios explica que, pese a esa caída, el valor de las ventas rusas se incrementara el 30,9 % en ese periodo, hasta superar los 378,6 millones de euros.

Las exportaciones españolas a ese país fueron algo más de 114.000 toneladas, el 2,9 % menos que en 2021, aunque su valor se elevó un 14 %, hasta unos 290 millones de euros.

De esta forma, la balanza comercial agroalimentaria con Rusia arrojó en 2022 un déficit para España de 87,6 millones de euros, lo que se traduce en unas 521.600 toneladas de diferencia.



SITUACIÓN CONFLICTIVA CON RUSIA

Las principales compras a Rusia fueron abonos (142,5 millones de euros), cereales (63,3 millones) y residuos de la industria alimentaria (50,4 millones).

Tras la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022 y las restricciones a la exportación de fertilizantes y granos de esos dos importantes productores redujeron la disponibilidad de dichos productos básicos en el mercado internacional y ocasionaron una subida de costes.

Los esfuerzos diplomáticos desplegados después han mejorado la situación y España, como reflejan los datos, no ha dejado de adquirir de Rusia abonos y cereales, materias esenciales para la agricultura y la alimentación de las que es deficitaria.

El comercio de España con Rusia ya se vio afectado en 2014 por el embargo alimentario que el presidente ruso, Vladímir Putin, impuso a Occidente en respuesta a las sanciones que la Unión Europea (UE) y otros países introdujeron contra Moscú por su papel en el conflicto ucraniano, a raíz de la ocupación de Crimea.

El sector hortofrutícola español sigue siendo desde entonces uno de los sectores más afectados por el boicot ruso, especialmente los cítricos.

En 2022 España solo vendió a Rusia 2.100 toneladas de legumbres y hortalizas de origen español, al tiempo que exportó 71.300 toneladas de fruta, el 147,4 % más que en 2021, equivalentes a medio millón de euros, según los datos oficiales.

Las principales exportaciones españolas a Rusia fueron bebidas (51,6 millones de euros), semillas oleaginosas y plantas industriales (21,2 millones); y cacao y preparados (14,5 millones).

En volumen, las mayores ventas españolas correspondieron a conservas de frutas y verduras y zumos (43.600 toneladas); seguidas de bebidas (25.900 toneladas) y grasas y aceites (casi 8.400 toneladas).



LA PARTE UCRANIANA

Por el lado de Ucrania, sus ventas agroalimentarias a España crecieron en valor el 80,5 % anual en 2022, sumando 1.894 millones de euros, mientras que en volumen el ascenso fue del 63,5 %, con 5,1 millones de toneladas.

La principal partida fueron los cereales, un total de 4,7 millones de toneladas valoradas en 1.409 millones de euros, y en menor medida las grasas y los aceites como el de girasol, con 276.200 toneladas por 392 millones de euros, según el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

Tras meses de parálisis y bloqueo naval, el acuerdo del Mar Negro, auspiciado por la ONU y Turquía, permitió en agosto pasado la reanudación de las exportaciones de grano ucraniano, de las que España se ha beneficiado como segundo destino, por detrás de China.

En el comercio agroalimentario bilateral, España registró en 2022 un déficit de 1.752 millones de euros con Ucrania, puesto que las exportaciones españolas apenas sumaron 142,2 millones de euros, el 22,4 % menos que el año anterior.

Entre las ventas a ese país en guerra destacaron los pescados, crustáceos y moluscos, con 22,6 millones de euros (11.200 toneladas); así como las conservas de verduras y frutas y los zumos (15,1 millones de euros) y el resto de las bebidas (14,2 millones de euros).

 

Belén Delgado