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El ministro polaco de Desarrollo, Waldemar Buda, anunció este miércoles la intención de su Gobierno de prolongar "con seguridad, al menos hasta el final de este año" la prohibición de importar productos agroalimenticios ucranianos.

En una entrevista de la emisora Radio Zet, el ministro indicó que, a la lista de 30 productos cuya importación se ha prohibido, se añadirán otros siete, entre los cuales está la carne de pollo, de la que Polonia es el principal productor y exportador de Europa

Buda defendió esta decisión y dijo que "es absolutamente imposible levantar el embargo en julio, porque eso conduciría a que el grano (ucraniano) volvería a llenar los silos polacos, que ahora estamos vaciando con tanta urgencia".

El responsable de la cartera de Desarrollo insistió en que Polonia mantendrá su prohibición hasta que la Unión Europea (UE) acuerde "soluciones a nivel europeo" y añadió que su país "ha creado una fuerte alianza, con una sola voz, que le plantea un problema a la Comisión Europea (CE)".

Hace unas semanas, Varsovia impuso unilateralmente un embargo a la importación y al tránsito de productos agroalimentarios procedentes de Ucrania, una medida a la que se unieron en pocos días Rumanía, Eslovaquia, Hungría y Bulgaria.

La semana pasada, Polonia permitió que se reanude el tránsito de convoyes ucranianos que transporten estos productos, con la condición de que no se vendan en su territorio y el destino final sea otro país.

Buda afirmó que la reacción polaca "fue muy razonable, en equilibrio con los intereses de Ucrania y los de los agricultores polacos".

Por otra parte, el portavoz del Gobierno polaco, Piotr Müller, culpó en otra entrevista radiofónica este miércoles a la CE de no haber tomado "las medidas adecuadas" sobre esta situación, porque, según él, hace ya doce semanas que Polonia les alertó sobre el riesgo de desestabilización del mercado agroalimentario en Europa central y oriental.

"La prioridad para el Gobierno polaco es la seguridad alimentaria del pueblo polaco", enfatizó Müller.

Sobre las ayudas anunciadas por Bruselas para mitigar el efecto de las importaciones de Ucrania en los países más afectados, Müller dijo que "estamos hablando de importaciones por valor de miles de millones", por lo que Varsovia aspira a que la cantidad de esas ayudas sea de 2.200 millones de euros.