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En torno a 20.000 reses han iniciado su camino de retorno a los 'agostaderos' de la abulense Sierra de Gredos, desde las dehesas de Extremadura y Castilla-La Mancha, protagonizando una "muy esperada" trashumancia, después de la "terrible sequía" primaveral.

De esta manera, en un año complicado se vuelve a cumplir con una tradición milenaria retransmitida nuevamente a través de las redes sociales por parte de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Carne de Ávila y la Asociación de Raza Avileña-Negra Ibérica, que han informado en nota de prensa del comienzo del recorrido.

Además de una tradición con siglos de historia, la trashumancia combina naturaleza y cultura, ya que quienes realizan aún esta actividad ganadera a pie transitan durante algo más de dos semanas por espectaculares espacios naturales y milenarias vías pecuarias que mantienen un importante patrimonio cultural.

Una de esas vías es la Cañada Real Leonesa Occidental, de la que forma parte la Calzada Romana del puerto El Pico, por la que suelen ascender a pie, en sus últimas etapa, cientos de reses de la raza Avileña-Negra Ibérica que durante dos semanas realizan entre 25 y 30 kilómetros diarios.

De las 20.000 reses que realizan este trayecto desde las tierras situadas al sur de Ávila, en torno a 3.000 siguen manteniendo la tradición de las trashumancia a pie, ya que la mayoría retorna a Gredos en los camiones que las lleva hasta los pastos en los que permanecerán hasta finales de año, momento en el que volverán nuevamente a las cálidas tierras del sur.

Según la IGP y la Asociación de Criadores, este año la vuelta a Gredos es "muy esperada", ya que "la terrible sequía" sufrida durante la primavera y "sus consecuencias directas de falta de pastos, escasez de suministros de agua", ha provocado que los ganaderos "hayan tenido que suministrar a los animales alimentación suplementaria y agua antes de lo habitual".

Este año, la IGP Carne de Ávila y la Asociación de Raza Avileña-Negra Ibérica van a volver a retransmitir parte del camino en sus redes sociales, para "mantener el espíritu y las ganas de transmitir lo que supone esta actividad tan tradicional y tan arraigada en esta cultura".

Estas emisiones "ponen en valor la trashumancia como patrimonio cultural, con un modelo de producción y un conocimiento y cultura ganadera de esta práctica que, a través de la experiencia vivida por los trashumantes, han hecho y hacen especial y fascinante a esta práctica ganadera".

Por otra parte, ya está abierto el XV Concurso Fotográfico de Trashumancia, en el que podrán participar con fotos que "reflejen momentos ligados a esta actividad, como la subida de las vacas por la cañada, paisajes, escenas de las diversas celebraciones, etc".

Los premios consisten en una colección de libros y/o material de fotografía y de trashumancia, valorados en 500 euros el primero y 300 euros el segundo.