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El doctor e ingeniero agrónomo Javier López comenzó su trayectoria en el vacuno de carne en 1998, cuando fue nombrado director técnico de la asociación Asovac, para unos años más tarde, en 2002, hacerse con la dirección de esta entidad que se fusionó posteriormente con Aprovac y formaron Asoprovac.

Ahora, como gerente de la Asociación Española de Productores del Vacuno de Carne (Asoprovac), López asegura que 2015 será un año "difícil" pero lleno de desafíos y oportunidades para todos los que trabajen en este sector.

Además, tiene claro que los primeros pasos que tiene que dar la nueva interprofesional Provacuno son para definir su estructura y analizar aspectos básicos a desarrollar.

PREGUNTA: Finaliza 2014 con la creación de Provacuno, ¿cuáles son, según Asoprovac, los primeros pasos que tiene que dar la interprofesional en 2015?

RESPUESTA: Los primeros pasos están claros. En primer lugar, tiene que definir su estructura y comenzar a analizar los aspectos que los empresarios del sector -tanto de la producción como de la industria, transformación y comercialización- consideren básicos y prioritarios para, posteriormente, definir los medios con que afrontarlos.

P: ¿Hubiera sido necesario contar antes con una interprofesional de estas características?

R: Pensamos que sí, porque habríamos tenido antes un punto de encuentro del conjunto del sector, especialmente en lo referido a la relación entre producción e industria. Estamos convencidos de que esta interlocución más estrecha hará que seamos más eficientes en aspectos como la internacionalización, la relación con el consumidor, la imagen del producto y un largo etcétera de cuestiones que tiene que afrontar de manera muy unida y coordinada toda la cadena.

P: El sector aún no ha notado prácticamente los efectos del embargo ruso, impuesto a primeros de agosto. ¿Cómo afectará al vacuno de carne si no se levanta dicho embargo?

R: Pues evidentemente, es un destino de carne que se ha cerrado por motivos ajenos al sector, lo cual es francamente negativo. Las consecuencias inmediatas es que se han tenido que buscar otros destinos pero que no valorizan tanto esos productos como el mercado ruso.

P: ¿Cuál es el efecto sobre el mercado español?

R: El efecto sobre el mercado español es indirecto, es decir, nos veremos afectados por carne procedente de otros países europeos que eran proveedores rusos, como por ejemplo, Polonia, Alemania o Irlanda, que deberá recolocar sus producciones y, nos guste o no, parte de esa carne vendrá al mercado español a un precio inferior.

P: ¿Qué tiene que hacer el sector en 2015 para seguir abriendo mercados en el exterior y reforzando los existentes?

R: Pues de forma clara, organizarse y pensar en colectivo en lugar de individualidades. Evidentemente, esto es mucho más fácil decirlo que hacerlo, pero es la vía para hacer sostenibles a medio y largo plazo estos mercados.

P: ¿Qué aspectos son importantes para mantener los mercados exteriores?

R: Hay un aspecto absolutamente esencial para el mantenimiento de los mercados exteriores y ese es el sanitario. La actual ministra dijo el pasado año en nuestra Asamblea General una frase que es absolutamente cierta: "Sin sanidad no hay comercio" y yo me atrevería a continuar diciendo que sin comercio no hay renta, por lo tanto tenemos que cuidar de manera prioritaria este aspecto.

P: ¿Cómo resumiría el año 2014 para el sector del vacuno de carne español y, especialmente, para sus ganaderos?

R: 2014 ha tenido aspectos positivos, como la estabilidad de precios de materias primas esenciales para la alimentación animal, unas condiciones climáticas aceptables para el ganado extensivo, un precio de la carne interesante en el primer semestre o la puesta en marcha de la interprofesión. Y negativos, como el embargo ruso, una bajada algo anormal del precio de la carne en el segundo semestre y un aspecto prioritario, como es la atonía en el consumo interno.

P: ¿Cómo aventura que será, en líneas generales, el año 2015?

R: Pensamos que será difícil, con un desequilibrio mayor entre oferta y demanda interna, que solo podrá ser corregido a corto plazo si trabajamos muy bien los mercados exteriores, tanto de animales vivos como de carne. Además, debería servir para dar un empujón a diversos esquemas asociativos de producción, como por ejemplo, las Organizaciones de Productores, tal como están reflejados en el Reglamento comunitario de la OCM Única. En fin, 2015 será un año lleno de desafíos pero también de oportunidades para todos aquellos que trabajan en nuestro sector.