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La producción industrial de pienso compuesto para animales (de granja y domésticos) en España ha superado por primera vez la barrera de los 24 millones de toneladas (24,17 millones de toneladas), lo que supone un incremento del 1,68 % respecto a 2016.

La Confederación de Fabricantes de Alimentos Compuestos Para Animales (Cesfac) ha dado a conocer hoy el balance de volúmenes de pienso compuesto, en el que se detalla que el 95,8 % se destinó a la ganadería (23,15 millones de toneladas) y el restante 4,2 % (1 millón de toneladas), para animales de compañía.

La elaboración de alimento para el porcino lideró el ránking, con 10,6 millones, un +1,72 % interanual; seguido por el grupo ovino, caprino, vacuno, cunícola, con 7,9 millones de toneladas (+1,93 %) y el avícola (4,45 millones de toneladas y un +1,09 %).

Dentro de la producción para mascotas, el volumen fabricado para perros y gastos fue de 990.000 toneladas (+2,15 %).

Para 2018, Cesfac prevé que la producción de pienso descienda ligeramente (-0,78 %) y se queda en los 23,96 millones de toneladas, debido a la mayor incorporación prevista de forrajes para alimentar el ganado.

El presidente de Cesfac, Fernando Antúnez, ha indicado que los datos muestran que la industria española "es capaz" de asumir la "responsabilidad de liderazgo europeo", lo que "es posible gracias al ejemplar comportamiento de la producción ganadera".

Según Antúnez, el sector productor de piensos es "consciente" del "importante papel" que juega la alimentación animal como primer eslabón de la cadena alimentaria.

Se trata, a su juicio, de un "eslabón fuerte", construido "en torno a pilares tan sólidos como lo son la innovación, el equipo humano, la seguridad alimentaria, la sostenibilidad y la nutrición".