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Los tunecinos han sacrificado hoy cerca de quince mil corderos procedentes de España con motivo del "Aid al Adha", la fiesta musulmana del sacrificio, importados por el Ministerio de Comercio de Túnez, según la prensa local.

La medida se ha realizado con el objetivo de "ayudar a bajar los precios del mercado interior, evitar la especulación y el encarecimiento del producto".

El responsable de la Organización de Defensa de los Consumidores (ODC), Eslim Sadallah, afirmó a la prensa local que "el éxito de los corderos de España se debe a que los precios estaban bien estudiados, por lo que la cantidad importada ha sido vendida en su totalidad".

El Ministerio de Comercio tunecino promovió hace un mes una campaña de importación de corderos ibéricos que llegó a Túnez en dos transacciones comerciales por vía marítima de 6.000 corderos cada una, que fueron distribuidos por los mercados populares de todo el país.

El éxito de ventas empujó a las autoridades a importar otras 2.500 cabezas de ganado la semana pasada, que también se vendieron en pocos días.

La venta de la última partida de ovinos importados provocó una bajada de los precios y ayer se podían comprar corderos por 100 dinares (50 euros), lo que favoreció que muchos hogares acuciados por el vertiginoso alza de los precios y la inflación pudieran cumplir con la tradición de degollar un cordero en conmemoración del sacrificio llevado a cabo por Abraham, según la tradición coránica.

Sin embargo, Sadallah subrayó que debido al "descenso del poder adquisitivo", un 60 por ciento de los hogares tunecinos se han quedado este año sin posibilidad de llevar a cabo el sacrificio, que coincide, además, con el fin de la peregrinación mayor a la ciudad santa musulmana de La Meca, en Arabia Saudí.