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Unión de Uniones de Castilla-La Mancha se ha dirigido al consejero de Agricultura, Francisco Martínez, para pedirle que acelere los trabajos para que los agricultores y ganaderos pueden cobrar el anticipo PAC del 70 % de las ayudas a partir del 16 de octubre.

Según ha informado esta organización agraria en nota de prensa, el anticipo de la PAC a fecha de 16 de octubre, cuando la fecha normal de inicio posible de los pagos sería el 1 de diciembre, "es un mecanismo excepcional que se autoriza por la Comisión a petición de los estados miembros para remediar la situación económica de los agricultores y ganaderos en circunstancias especiales productivas (sequías) o del mercado (crisis sectoriales, por ejemplo).

Y ha subrayado que este adelanto supondría una inyección de cerca de 500 millones de euros para un conjunto de unos 135.000 beneficiarios.

Según avanzó el pasado martes el presidente del FEGA, Ignacio Sánchez Esteban, como novedad este año estos anticipos, que se han convertido en algo habitual ante la frecuencia de las circunstancias especiales, alcanzarían al 70 % del pago básico y el pago verde o 'greening'.

Igualmente podrán este año ser anticipadas las ayudas complementarias al pago básico para los agricultores jóvenes, así como las ayudas asociadas a la producción en determinados sectores, fundamentalmente ganaderos.

Unión de Uniones ha hecho hincapié en que, para que el anticipo puede llegar a los beneficiarios de la comunidad autónoma, además de tener una idea más o menos precisa de las cantidades que corresponden a cada solicitante, las autoridades regionales tendrán que haber completado o al menos tener muy avanzados los controles y muestreos exigidos por la reglamentación comunitaria para garantizar la legitimidad de los pagos.

Y ha subrayado que esta condición es especialmente importante en el caso de los jóvenes agricultores y las ayudas acopladas, en las que las comprobaciones administrativas a realizar son más complejas.

En la misma nota, Unión de Uniones ha reiterado su desacuerdo con el modelo de distribución de ayudas PAC, ya que sigue permitiendo que una parte muy importante de las mismas sigan percibiéndolas quienes no tienen en la agricultura o la ganadería su profesión y, además, concentrando la mayor parte de las mismas en un número reducido de grandes perceptores al no haberse impuesto techos máximos de ayuda.