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El gobierno catalán ha aprobado hoy un conjunto de medidas para apoyar la gestión de los purines por parte de los ganaderos, entre las que destacan dos línea de ayudas de 3,3 millones y 1,9 millones de euros.

Estas líneas de ayuda están previstas para facilitar la gestión inmediata de los purines que antes se trataban en las plantas de secado, para lo que se destinan 3,3 millones, y para la instalación de sistemas de tratamiento de deyecciones, que contarán con los 1,9 millones restantes.

Según ha informado el gobierno catalán en un comunicado, estas ayudas pretenden "paliar" el impacto del cierre de las plantas de secado de purines, uno de los principales problemas medioambientales del sector porcino.

El cierre de estas plantas, provocado por la modificación del sistema de primas otorgadas a las energías renovadas por parte del Gobierno, ha obligado a muchos ganaderos, que hasta ahora llevaban los purines a estas explotaciones, a cambiar de estrategia en la gestión de estos residuos.