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Los alcaldes de los municipios afectados por el incendio que quemó 3.080 hectáreas hace dos semanas en la sierra de Cardó-Boix se han reunido hoy con el departamento de Agricultura para poder conseguir que los rebaños de cabra blanca vuelvan a pastar en la zona tras el verano.

El delegado de Agricultura en las Tierras del Ebro, Pere Vidal, se ha reunido hoy en Rasquera con los alcaldes de Rasquera, El Perelló, Tivenys y Benifallet, cuyos términos municipales resultaron afectados por el fuego.

Tras el incendio, Vidal ha comentado que la de hoy ha sido "la primera de una serie de reuniones" y que en ella se ha "efectuado un análisis de todo lo hecho en la sierra de Cardó en los últimos años", y ha dicho que "se ha hecho bastante labor" y que los esfuerzos han sido "considerables, sobre todo desde el 2005 hasta ahora, ya que el 25% de los recursos en materia de prevención forestal de las Tierras del Ebro se han destinado a esta sierra".

Vidal ha recordado que "los recursos son los que son ahora", y ha apostado por "aplicar medidas que no impliquen costos significativos", además de apuntar como solución que "vuelvan los rebaños de cabra blanca y los pastos de vacas y bueyes de la zona lo antes posible".

Se pretende evitar así lo sucedido tras el incendio de 1995, que quemó casi 5.000 hectáreas, y tras el cual los rebaños de cabra blanca, una raza autóctona muy apreciada, tardaron casi cinco años en volver a pastar por la zona.

"No hay fecha exacta, pero en cuanto salgan los primeros brotes, y si el tiempo acompaña, esperemos que puedan volver en septiembre o un poco más adelante", ha explicado Vidal.

El delegado de Agricultura ha explicado además que se creará un nuevo plan de prevención forestal para la sierra de Cardó, cuya redacción se tratará en próximas reuniones, pues se pretende que participen "todos los sectores implicados".

En la reunión, los ayuntamientos de El Perelló y Rasquera han aportado cada uno un informe explicativo de los daños sufridos en terreno agrícola, rebaños, etc, y se lo han entregado a Vidal porque su intención es que "Agricultura elabore el informe de cuantificación económica de daños", según el alcalde de Rasquera, Bernat Pellisa.

En esta línea, Pellisa ha dicho ser "consciente de la situación económica actual, pero no podemos renunciar a pedir recursos para esto" ya que Agricultura se ha comprometido a evaluar los daños, pero no a indemnizar por ellos, como pretenden los alcaldes.

Por ello, el alcalde de El Perelló, Ferran Cid, ha sido el más crítico y ha señalado que "no es normal" que en cien años esta sierra haya sufrido cinco incendios, o que ardan 3.080 hectáreas en el último, por lo que hay que "crear los mecanismos necesarios para actuar antes y evitarlo".

"Los accesos a la sierra son insuficientes y pedimos más caminos, más puntos de agua, más cortafuegos y medidas que impidan la expansión de otro incendio", ha aducido el alcalde de El Perelló.

Cid ha apuntado que, además de las cabras, otro sector muy afectado es el apícola -la miel de El Perelló tiene fama mundial-, por lo que ha insistido en "buscar soluciones" para los productores de miel.

Por su parte, la alcaldesa de Tivenys, Maria Beltran, ha coincidido con Cid en solicitar "la colaboración de las administraciones" ya que se trata de municipios pequeños con escasos recursos.

La próxima reunión entre Agricultura y los cuatro alcaldes se celebrará dentro de 15 o 20 días, cuando se supone que ya estará la cuantificación económica de los daños.