Ferias,
Mercados y Mataderos

Ejemplares de gallinas autóctonas de la Comunitat Valenciana como la Valenciana de Chulilla o la Alicantina, ambas en peligro de extinción, competirán en la muestra Avival de Requena por ser elegidas Miss Gallina 2014, el ave que cumpla más fielmente con el patrón de raza original.

Esta es una de las actividades que propone la Asociación de criadores de aves de raza de la Comunitat Valenciana (Avival) en la octava edición de esta muestra avícola, para recuperar razas de gallinas autóctonas, que se exhibirán junto a otras españolas como la pita pinta asturiana, la andaluza sureña o la catalana del prat.

En la muestra, que se celebrará entre el 28 y el 30 de noviembre, se exhibirán más de un millar de gallinas, palomas, faisanes, perdices, cines, patos, e incluso conejos de pura raza de todo el mundo con patrones genéticos invariables en siglos, ha informado la organización de Avival.

Los animales estarán todos anillados, seleccionados, identificados y en perfecto estado de salud y serán juzgados por jueces especialistas de Bélgica, Alemania y España y en cada espacio dedicado a una raza habrá una reseña de sus características para que los visitantes puedan conocer sus orígenes y curiosidades.

Entre los animales más curiosos, se podrá ver la gallina más pequeña del mundo, llamada Serama y cuyo peso no supera los 250 gramos o el ejemplar de más envergadura, la gallina Brahma, que puede alcanzar el metro de altura.

Junto a ellas, animales de diferentes continentes y países como la gallina Marans de Francia, el gallo combatiente Inglés Moderno, el gallo de raza Leghorn, el gallo asutralorp de Australia o la gallina sedosa de Japón, cuyas plumas tienen el aspecto del pelo humano.

La feria contará con visitas de colegios e institutos de la Comunitat, en las que los escolares recibirán charlas de genética básica aplicada a animales, impartida por un especialista en la materia, y acogerá otras charlas técnicas sobre control de plagas, medicamentos o la gestión de instalaciones de cría.

En una superficie de más de mil metros cuadrados, en condiciones óptimas de luz y temperaturas para los animales, el público, según la organización, podrá disfrutar del entorno, observar animales únicos y completar la oferta con el abanico gastronómico que ofrece la zona.