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La Comisión Europea ha aprobado modificaciones en los pliegos de condiciones de la Denominación de Origen "Los Pedroches" que contienen cambios como la producción de jamones y paletas sólo procedentes de cerdos 100 % ibéricos por lo que se prohíben las piezas de cerdos 75 % ibéricos.

Según el documento publicado en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE), este cambio pretende limitar la producción amparada por esta DOP a los productos "de la máxima calidad comercial dentro de su sector".

Esta DO lo justifica en el hecho de que los consumidores, "que reconocen esa singularidad" de los jamones y paletas "ibéricos", "cada vez son más conscientes de las distintas clasificaciones comerciales existentes" en función de la pureza genética y de la alimentación de los cerdos, "mostrando preferencia" por los productos procedentes del cerdo 100 % ibérico.

"Por otro lado, esta modificación contribuirá a la conservación de la pureza de la raza ibérica", según el argumentario.

MÁS CAMBIOS

La modificación permite que los cerdos no hayan nacido en la zona geográfica delimitada y definida para este sello de calidad y que sólo hayan desarrollado en dicha zona amparada por la Denominación de Origen "sus fases de producción", es decir, la cría, el engorde, el sacrificio, el despiece y todas las fases de elaboración de los productos.

Se suprime así la restricción impuesta al lugar de nacimiento de los animales porque "carecía de justificación técnica".

También se elimina la clasificación "recebo", que aún recogía el pliego original de la DOP "Perdoches", al ser una categoría eliminada por la actual Norma de Calidad del Ibérico.

Tras estos cambios, la DOP se queda con las categorías "bellota 100 % ibérico" y "cebo de campo 100 % ibérico".

Entre otros cambios aprobados, se añade la posibilidad de reducir la densidad máxima de cerdos por hectárea según los parámetros establecidos en la Norma de Calidad para la categoría "de bellota"; se introduce el peso mínimo que marca dicha norma para los jamones y paletas 100 % ibéricos; y se incluye la posibilidad de mantener la pezuña en los jamones y paletas cuando se comercialicen enteros.

Además, se elimina el control del análisis de los ácidos grasos mediante la técnica de cromatografía de gases porque recientes estudios han mostrado que "no es un método científico fiable" para clasificar a los animales según los diferentes tipos de alimentación; y se incluirá la mención a la raza y a la alimentación en el etiquetado de los productos.